Prepararás de antemano tu sacrificio de alabanza o esperas encontrarlo en el templo? ¿Harás tú la debida diligencia de seleccionar el sacrificio correcto o descansarás en la experiencia de un lÃder de alabanza que lo hará por ti?
Si realmente los cristianos tenemos una doctrina superior, deberÃa serlo también nuestra manera de vivir. A diferencia de la filosofÃa, que encuentra su propósito en el conocimiento por sà mismo, la doctrina cristiana carece de valor cuando solamente se entiende; hasta que no somos llevados a actuar, a decidir, a cambiar de rumbo, ella no ha alcanzado su propósito.
Una valiosa relación en la vida de todo creyente es su relación pastoral, relación que debe ser edificada intencionalmente a través del tiempo con el fin de llegar juntos a glorificar al Señor. El pastor ha sido dado por Cristo a su rebaño para dirigirle, cuidarle y alimentarle, con la advertencia solemne de que un dÃa dará cuenta por cada oveja al Señor de los pastores.
Ante la posibilidad de que «mi correcta doctrina» le sea un estorbo coloco a mi hermano por encima de mi placer, que es el mejor uso que puedo hacer de mi libertad cristiana. Quizás, absteniéndome yo ahora por amor a mi hermano logro que eventualmente ambos tomemos vino en la presencia del Señor.
Presentación Esta es la última parte de esta serie de artÃculos sobre el canto congregacional (siete partes y la introducción, ocho en total). De todas, fue la más difÃcil de escribir, pues aunque parto de un sermón que prediqué en nuestra iglesia, gran parte del contenido es nuevo, principalmente de esta última parte. Quedaron pendientes […]