La gracia común de Dios se ve en la vida de los cainitas (la reprensión, la edificación de ciudades, el establecimiento de familias, el desarrollo tecnológico y en el florecimiento de las artes), con su expresión más grande en tu paciencia.
Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si te oyere, has ganado a tu hermano. (Mateo 18:15) Cuando enseño sobre el perdón lo que más dificultad les da a las personas entender no es perdonar en sÃ, sino tomar la iniciativa de hacerlo a pesar de […]