Asuntos básicos como tener una agenda o un presupuesto podría impactar más en tu crecimiento espiritual de lo que has sido consciente.
Dios tiene que estar presente, en el primer lugar de nuestras vidas, pues Él es el dueño de las cosas que administramos y por su voluntad las tenemos, pero también Él creó nuestro corazón, y solamente Él tiene la capacidad para dar verdadera satisfacción a nuestra alma; sin Él, todo es absurdo.
Pregunta: ¿Puede un cristiano participar en un negocio multinivel? El…